Recuerdo que el Día de la Madre del año pasado lo viví con mucha emoción. Casi la misma que el que disfruté hace 4 años, el primero que celebraba siendo madre y casi como todos los que he tenido (y tengo) la suerte de tener a la mía junto a mi.
No deja de ser un día muy especial en el que, por qué no, se deben tener detalles un poco más bonitos que durante el resto de días del año (de los que nunca nos debemos olvidar).
Ya os he hablado en alguna ocasión de la firma de joyas personalizadas Mifabula y sus detalles para ocasiones como el Día de los Enamorados, el Día del Padre o la Primera Comunión. Hoy os presento las propuestas en forma de pulseras que nos ofrece con motivo del Día de la Madre y que no dejarán indiferentes a ninguna mamá. Como siempre, delicadeza, originalidad, distinción y emoción en cada una de sus joyas personalizadas:
Asi que tenéis 2 opciones: la primera, entrar ahora mismo en www.mifabula.com y hacer un pedido para vuestra madre (o para la persona que deseéis) y la segunda, enviar el link de este post a esa persona de vuestro entorno que todavía no tiene ni idea de lo que os puede gustar… 😉
Y a vosotras, ¿qué sentimientos os despierta el Día de la Madre? ¿Recordáis algún regalo de manera especial? Y, estas pulseras de Mifabula ¿os gustan como detalle para regalar o que os regalen?
¡Espero vuestros comentarios! ¡Gracias por leerme!
Blanca Rosa Amor Huidobro says
El sentimiento de ser madre se vive todos los días de tu vida, cuando la tienes porque sabes que ahí está para escucharte ,para aconsejarte ,para ver las cosas de otra manera que a lo mejor tu no lo ves.Cuando te falta te acuerdas de ella todos los días ,sobre todo cuando te pasa algo que sólo a ella contarías porque es ella la única que te comprendería.Gracias mama por todo lo que compartimos y me ayudaste.
Blanca Rosa Amor Huidobro says
Quizá el comentario anterior ha sido más como hija que como madre.Como madre puedo decir que aunque ya no viven mis hijos conmigo les tengo presentes todos los días y todos los momentos ,disfrutando de sus alegrías y preocupándome de sus penas y procurando estar ahí en el momento que me necesitan,aunque los que viven fuera me gustaría disfrutarlos más y como no también de mis nietos.