El pasado 30 de noviembre disfrutamos de un mágico, divertido y navideño día en Parque Warner. Mi marido, mi niña y yo, junto a la familia de mi amiga Natalia del blog Historietas de mamá y la de Laura del Club de Malas Madres, pudimos comprobar las sorpresas que depara gracias a sus nuevas y entrañables animaciones, sus espectáculos para todos los públicos y su auténtica estampa navideña. No le falta detalle a su decoración: rincones nevados, abetos decorados, guirnaldas y una iluminación única que nos envolvieron en un halo de ilusión durante toda la jornada.
Disfrutamos de algunas atracciones y espectáculos como el Laberinto Infantil, dentro de El bosque animado de los Looney Tunes, que alberga un recorrido tematizado donde aparecían los personajes más variopintos que nos hicieron disfrutar de lo lindo.
Tuvimos la oportunidad única de conocer al reno Rudolf y visitar La Fábrica de Juguetes donde Hermenegilda, la paje que más mola de la Navidad y otros personajes nos contaron historias acerca de estas fechas tan entrañables. Todo dentro de una tematización simulando un bosque helado de Laponia.
Después de la intensa mañana que llevábamos, el hambre apretaba y necesitábamos parar a reponer fuerzas. Pero las sorpresas no acabaron durante la comida navideña con espectáculo que pudimos disfrutar en el restaurante Studio Café, situado en Warner Bros Studios. Una más que agradable velada en la que degustamos unos menús navideños dirigidos a grandes y a pequeños acompañada del show navideño “La urna dorada de los deseos”. Como colofón, en la cúpula del restaurante Studio Café, se encontraba la morada de los Reyes Magos y… ¡pudimos saludarles y todo!
Después de comer la lluvia hizo acto de presencia, pero no impidió a nuestros hombres descargar adrenalina en las atracciones Superman, La Atracción de Acero y Batman: La Fuga. Si es que son como niños…
La lástima que acabamos pronto la jornada y nos quedamos con las ganas de ver el gran desfile de Navidad protagonizado por los Looney Tunes, Papá Noel, los Reyes Magos y decenas de duendes, hadas y elfos… Pero quién sabe, igual volvemos antes del 4 de enero… ¿Nos vemos por allí?
Un precioso plan para impregnarnos de toda la magia de la Navidad y de la diversión de Parque Warner, ¿no creéis?
Niña qué días más entretenidos pasáis por Madrid. Oye, es que en Barcelona no nos hacen estas cosas tan chulas. Yo el parque de la Warner no lo conozco, así es que me lo apuntaré como futuro destino para cuando crezca mi bichilla.