Durante el verano, lo normal es que disfrutemos de más ratos al aire libre en las playas o piscinas, haciendo excursiones, practicando algún deporte o sentados en una terracita… Lo habitual es que protejamos nuestra piel de, por ejemplo, las radiaciones solares. Pero, ¿y nuestros ojos? ¿Les prestamos la atención necesaria? En este post encontrarés algunas pautas para cuidar nuestros ojos en verano.
Factores que inciden en la salud de nuestro ojos
- El sol. Los rayos UV perjudiciales para nuestros ojos y nuestra piel están presentes todo el año, pero es durante la época estival cuando debemos tener más precaución con ellos. ¿Por qué? Pues porque estos rayos inciden de manera más intensa que durante los meses más calurosos del año. Además, en la temporada de verano, los reflejos de los rayos del sol aumentan, por lo que se multiplican las probabilidades de deslumbramientos.
- El calor y la contaminación. Estos factores inciden especialmente en que notemos cierta sequedad ocular. La concentración de elementos contaminantes, propiciada por las altas temperaturas, multiplican las posibilidades de que suframos conjuntivitis alérgica (un trastorno asociado a la existencia de un polen más agresivo que e del que produce picor, ojos rojos y vista borrosa).
- Aires acondicionados. Aunque nos alivian y refrescan en los días más calurosos, debemos tener especial precaución con ellos también porque, por ejemplo, las corrientes de aire que producen aumentan las probabilidades de que la lágrima se evapore y de padecer, como consecuencia, sequedad ocular.
- La sal del mar y las bacterias que podemos encontrar en ríos, lagos o pantanos, aumentan el riesgo de conjuntivitis bacteriana. Por otro lado, el agua salada también actúa como un secante de la humedad de los ojos, lo que hace que los deshidrata y produzca sensación de ardor y picazón; por no hablar de los elementos contaminantes adicionales que pueda contener.
- El cloro de las piscinas. Es cierto que este agente desinfectante utilizado para acabar con las posibles bacterias del agua, no debe producir irritaciones salvo si se mezcla con diferentes sustancias, como orina y sudor.
¿Qué debemos hacer para proteger nuestros ojos ante estos factores?
- Procurar, en la medida de lo posible, evitar la exposición solar, sobre todo, entre las 10 y las 15 horas. En esta franja horaria los rayos solares llegan más directos a los ojos, ya que el sol no está en su posición más alta. Si no podemos remediarlo, pues al menos protegeremos nuestra vista con gorras con visera y gafas de sol con un alto índice de protección UVA. Es uso de estas últimas reduce en un 20 por ciento los problemas oculares ocasionados por el sol.
- Cuidado con las gafas de mercadillo. No nos engañemos con sus diseños llamativos o precios más que asequibles. No suelen estar homologadas de acuerdo a la normativa europea (el sello CE), y su filtro no suele ser el adecuado. Hoy en día no sólo podemos encontrar gafas de sol en nuestra óptica de referencia, sino que también podemos comprar gafas de sol online.
- Si precisáis de especial graduación, utilizad gafas de sol graduadas. Yo me las gradué y genial. Además, si queréis comprar gafas online graduadas, también podéis hacerlo indicando los datos necesarios para ello.
- Para terminar con el tema gafas de sol, mejor si sus lentes son polarizadas, ya que poseen un filtro especial que bloquea la luz reflejada y permiten una visión sin reflejos y con colores y contrastes naturales. Un recurso estupendo para una total protección frente a los rayos ultravioleta.
- Contra la sequedad, el empleo, por ejemplo, de lágrima artificial ayudará a refrescar y calmar las molestias.
- Algunas medidas para evitar la incidencia del cloro en nuestros ojos, pueden ser ducharnos antes de entrar en el agua y cuando salgamos, secar nuestros ojos con un pañuelo limpio (no con el pico de la toalla, que puede estar sucio) y utilizar gafas de bucear.
- Ojo con nuestros peques (nunca mejor dicho 😜). Hace un tiempo publiqué este post en el que os contaba por qué es necesario que las y los niños utilicen gafas de sol (homologadas, por supuesto).
No tenemos más que dos ojos y no cuesta tanto protegerlos y cuidarlos, os lo digo por experiencia…
Y vosotras y vosotros, ¿tenéis algún consejo más que queráis compartir para cuidar nuestros ojos en verano?
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