Cristalmina nos cuida en el postparto

Ya conocemos las propiedades de Cristalmina, el antiséptico transparente de Laboratorios Salvat, para desinfectar pequeñas heridas, ayudar a evitar posibles complicaciones y facilitar su cicatrización. Pero es interesante conocer (yo lo desconocía), que está también especialmente indicada en casos de cesárea y  episiotomía. Pero es que además, Cristalmina es el único antiséptico con la indicación de curación del cordón umbilical.

Durante las semanas siguientes al parto, las mujeres experimentamos numerosos cambios emocionales y físicos. Cristalmina, el antiséptico transparente de Laboratorios SALVAT, nos propone un decálogo con las principales claves de los cuidados en el posparto:

Hacer ejercicio:

• Con la práctica de ejercicio recuperaréis poco a poco la figura y descansaréis mejor por la noche.
• Los ejercicios de Kegelos ayudarán a fortalecer el suelo pélvico y evitar la incontinencia. Según el Profesor Óscar Seivane(Facultad Ciencias de la Salud Blanquerna), fisioterapeuta, osteópata y especialista en neurología y disfunciones de suelo pélvico en la mujer, «el cuidado del suelo pévico es clave para prevenir futuras pérdidas de orina. Además, las consultas al fisioterapeuta especalista en sualo pélvico son fundamentales para lograr que la cicatriz vaya ganado elasticidad«.
• Lo ideal: ejercicios de bajo impacto como el yoga o la natación, comenzando de forma gradual.
• A las seis semanas, ya se pueden hacer abdominales, siempre que el periné esté fortalecido y, a los dos meses, practicar deporte sin cansaros mucho.
• En caso de cesárea, la recuperación puede ser más lenta y deberéis esperar algo más.

Cuidad la herida de la cesárea:

• La zona de la barriga, en caso de cesárea, es muy delicada. Cuidad la herida con una correcta higiene, límpiadla con agua y jabón y mantenedla al aire el mayor tiempo posible.

• Las matronas aconsejan curar la herida con un antiséptico como la clorhexidina. Podéis usar Cristalmina, transparente, con acción desinfectante y compatible con la lactancia.

• La incisión de la cesárea afecta a varios músculos por lo que no os preocupéis si la zona de la cicatriz se queda como «dormida» hasta que los puntos cicatricen del todo.

• Controlad que la herida esté cicatrizando bien, que no supure y tenga buen color.

Curación de la episiotomía:

• Mantened los puntos limpios y secos, lavándolos con agua y jabón. Combinadlo con antisépticos para ayudar en la curación y prevenir infecciones. Del mismo modo que en la herida de la cesárea, podéis usar Cristalmina, especialmente recomendada por las matronas.

• Tras el baño, secad la zona con una toalla suave, dando ligeros golpes de delante hacia atrás.

• Los puntos suelen caer solos al cabo de una semana, por lo que la herida siempre debe estar bajo la supervisión de la matrona, quien controlará su evolución.

• Es habitual que tengáis miedo a ir al baño por temor a que con el esfuerzo los puntos de la episiotomía se suelten. Tranquilas, es algo improbable.

• Estos cuidados son suficientes para que la herida sane en cuatro o seis semanas.

Consejos sobre la lactancia:

• Si notáis que el bebé no mama lo suficiente o coge mal el pecho es probable que esté mal colocado. En este caso, pueden producirse retenciones de leche que inflamen el pecho o grietas en los pezones. Pedid ayuda a la matrona para aprender a dar el pecho correctamente.

• Si hay grietas, podéis hidratar el pezón con un poco de leche materna tras dar de mamar y dejar el pecho al aire para que se seque bien.

Hidratad vuestra piel:

• Tras ganar peso la piel de la tripa y los senos es propensa a la aparición de estrías. La crema hidratante, el aceite de almendras y rosa mosqueta son algunos de los productos que podéis usar como aliados. Si ya han aparecido, podéis aplicar tratamientos específicos para reducirlas.

• Hidratar el pecho no sólo ayuda a prevenir las estrías sino que previene su caída.

Retomad vuestra vida sexual:

• Recuperad las relaciones con calma y cuando os sintáis listas, con el apoyo de vuestra pareja.

• Es normal que el coito pueda resultaros doloroso al principio y que influya en gran medida el factor psicológico, por el miedo a que la penetración haga daño. La solución es un acercamiento progresivo y gradual. Si el dolor persiste, acudid al ginecólogo.

• No olvidéis que durante la lactancia no suele haber ovulación y es difícil quedarse embarazada pero no imposible. Tomad precauciones en cuanto tengáis relaciones sexuales completas.

Éstas son las claves de la puesta a punto que nos ofrece Cristalmina. Yo añadiría alguna más, pero ya os las contaré en otro post…

¿Cuáles son las vuestras?