Es la crema de «toda la vida», la que tenían nuestras abuelas y nuestras madres siempre en sus armarios del baño y ha permanecido en nuestro recuerdo. Esta crema ha cumplido ya los 100 años, así que es probable que también formara parte del recuerdo de sus antepasadas. Se trata de Nivea Creme, más conocida con la crema Nivea de la caja azul
Esta crema nació en el año 1911 en la ciudad de Hamburgo como resultado de muchos años de investigación y gracias al trabajo de 3 hombres: el farmaceútico y emprendedor Oscar Troplowitz que se percató del potencial del eucerit, una emulsión desarrollada por el químico Isaac Lifschütz que proporciona a la piel toda la hidratación que necesita. Esta emulsión se concibió inicialmente con fines médicos, pero el dermatólogo y profesor Paul Gerson Unna se dió cuenta del gran descubrimiento realizado por el Dr. Troplowitz, quien a su vez también reconoció las maravillas de este producto para el mercado cosmético. Lo único que faltaba era encontrar un nombre. Para encontrarlo, el Dr. Troplowitz se inspiró en la propia crema, su color blanco como la nieve, le llevó a encontrar la combinación perfecta: nix (nieve) y nivis (de la nieve), palabras de origen latino y de ahí surgió el nombre NIVEA.
Tres años después de su lanzamiento, se podía adquirir en cada contiente, y es más, casi el 50% de los beneficios venían de países interoceánicos y se abrieron fábricas en Buenos Aires, Copenhague, Méjico, Moscú, Nueva York, París y Sydney. Esta expansión a escala internacional era algo inusual en el mercado de la cosmética en aquella época. Como curiosidad, señalar que en algunos países como en Inglaterra, hubo que sustituir el envase de aluminio por uno de plástico porque la gente lo asociaba a latas de betún.
En sus inicios, la lata o la caja no era de color azul, sino de color amarillo decorada con una tipografía art nouveau de color verde. Hasta 14 años después, en el año 1925, no pasaría a tomar forma el color azul que hoy conocemos. Y no sólo el color se ha mantenido desde entonces, su textura y su olor característicos han permanecido también inalterables como signo de identidad para muchas generaciones.
Desde el lanzamiento de esta Crema Nivea de la caja azul hace más de 100 años, se ha comprobado que esta crema no sólo es una hidratante excepcional, sino que refuerza la barrera protectora de la piel del cuerpo en general, reduce la irritación después del afeitado, es óptima para la delicada piel de los bebés, para la zona del contorno de los ojos y está especialmente recomendada por muchos ginecólogos para prevenir la aparición de estrías en las mujeres embarazadas .
Vosotras, ¿qué más usos le dais a «la crema Nivea de la caja azul»? ¿Conocíais su historia?
Fuente: www.nivea.es
Leticia says
Nivea+Aceite de rosa mosqueta = cero estrías en el embarazo¡¡¡¡¡¡
admin says
Ya podía habérmela echado yo, Leti… Un beso!!
Eva Manjón says
Me encanta Blanca! Yo la uso para muchas cosas…
Rozaduras, para hidratar los pies, las manos, las rodillas y los codos, hasta para nutrir los bolsos de piel!
Es maravillosa y su olor inconfundible!
Muy chuli el repaso histórico que te has currado!
Un beso!
admin says
¡¡Muchas gracias por las aportaciones!! ¡Un besazo!