Ayer Cecilia tuvo una rabieta tremenda. Os cuento: La fui a recoger al colegio y me recibió bastante contenta. Cuando salíamos la quise poner la bufanda y una orejeras muy bonitas que le compró mi suegra, pero no quiso. «Bueno, pues nada», pensé. Le pregunté que qué tal le había ido en el cole, que […]