Hace más o menos un año, se pusieron en contacto conmigo desde la revista Imagen&Belleza. Para su próximo número, iba a aparecer un especial Embarazadas con cuidados antes y después del embarazo y buscaban experiencias de blogueras en primera persona. En concreto, compartí colaboración con Alejandra, de La aventura de mi embarazo, una de las blogueras más veteranas de la blogosfera maternal y, además, buena amiga.
Pues estas fueron las líneas que escribí:
Cuidados en el Embarazo
En primer lugar, es importante señalar que debemos cuidarnos siempre, manteniendo nuestra piel bien hidratada y protegida. Así, nuestro cuerpo estará mejor preparado para afrontar con garantía los cambios que éste pueda sufrir.
Cuando me quedé embarazada, mi marido me dijo que fuera a la farmacia a hacerme con alguna crema para prevenir y evitar las estrías, así que comencé en las primeras semanas del embarazo a aplicarme tratamientos específicos por la mañana y por la noche. Cremas anti estrías, aceites de rosa mosqueta, de almendras dulces… de todo. Pero las estrías comenzaron a aparecer al poco tiempo sin que nada de esto lo hubiera evitado; ramificaciones marrones que provenían de unos puntos imposibles de evitar. A pesar de todo, yo no cesé de continuar con mi rutina. Supongo que las características propias de mi piel o que no me había cuidado demasiado antes, tuvieron la culpa.
Por elcontrario la piel de mi rostro conseguí mantenerla a raya libre de manchas, uno de los peligros más frecuentes durante esta etapa. Es verdad que ya venía utilizando por costumbre cremas hidratantes con protección solar, aunque era algo que no me había preocupado demasiado debido a que la tez de mi piel es morena. A pesar de que todo mi embarazó transcurrió durante los meses de Primavera y Verano, con la ayuda de una protección moderada de, al menos, SPF15 diaria y de SPF60 en la playa, conseguí que mi rostro quedara libre de rastros solares.
El ejercicio físico es otro punto muy importante, ya sea en forma de natación, ejercicios específicos para embarazadas o simplemente caminar, que es lo que yo procuré practicar casi a diario junto a mi marido. Hacíamos ejercicio a la vez que conversábamos al final del día de cómo nos había ido, de las compras que nos quedaban por hacer o de lo que sería nuestra vida después.
En definitiva, que si conseguimos cuidar nuestra piel (y durante el embarazo, más), protegernos del sol, hacer algo de ejercicio, unido a la ingesta de una alimentación equilibrada y, al menos 1,5 litros de agua, conseguiremos mantener una buena hidratación y toda la energía tan necesaria en esta etapa.
Cuidados en el Posparto
No cabe duda de que el embarazo supone unos cambios físicos muy importantes para las mujeres y los esfuerzos que nuestro cuerpo realiza hacen necesario que lo mimemos y nos mimemos con especial cuidado y tenacidad después. Conseguir que la piel se recupere lo mejor posible es una máxima que debemos seguir en esta etapa. Continuar con una adecuada alimentación y una óptima hidratación, unido a la práctica de ejercicios adecuados a nuestro estado de salud y la aplicación de tratamientos reafirmantes, harán que poco a poco, nuestro cuerpo recupere la elasticidad y firmeza perdidas.
Pero más allá de obsesionarnos por recuperar nuestra figura, lo que yo considero más importante es tener pequeños detalles con nosotras mismas: aplicarnos un ligero toque de maquillaje a diraio, buscar un hueco para ir a la peluquería si nuestro pelo necesita de algún tratamiento, salir a dar paseos y permitirnos algún capricho, buscar un ratito para tomarnos un café con alguna amiga, buscar un momento de tranquilidad y diálogo con nuestra pareja… Son los mejores tratamientos de belleza que podemos seguir y que harán que nos sintamos mucho más guapas.
Que traer una nueva vida al mundo es lo más bonito que una mujer puede hacer, qué menos que mimarla como se merece, ¿no?.
Y vosotras, ¿cómo os cuidásteis?
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